Santiago, al igual que otras ciudades españolas, es la tierra de las tapas. Hay muchos bares que con una caña o un buen vino, ofrecen una tapita deliciosa. Aquí pondré los lugares donde mejor he comido o he tapeado por la ciudad o los alrededores.
Bar Coruña: cuando estoy habrienta o quiero comer algo sustancioso antes de ir de copas, voy al Bar Coruña y como un gran bocadillo de calamares. Los precios no son muy altos y la comida está bien. No es de lujo, entendemonos, pero te mantiene para seguir de juerga durante la noche.
Uno de mis favoritos es el O Beiro, una vinoteca que se encuentra en la misma calle del Bar Coruña. Los vinos son deliciosos y el queso fenomenal. Siendo extranjera, cuando alguien viene a visitarme, siempre le llevo aquí para que pruebe los sabores típicos de esta tierra maravillosa. Pero, sobre todo, voy para degustar los quesos: hay uno de cabra muy curado que es una maravilla.
Justo delante del Alameda está el Mesón Cestaño. Las tapas son deliciosas, el vino muy bueno (normalmente sirven Ramón Bilbao) y los camareros son muy amables. Los días de sol, en particular en primavera y en verano, sentarse en la terracita está de lujo. Voy a menudo allí también por la empanada y el marisco que de vez en cuando ponen como tapas. ¡Genial!
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